miércoles, 28 de mayo de 2014

¡ ESA VAINA, SE JODIÓ !



 ¡  ¡                                                                                                                                                                             
                                                                 

Estando  Manuel prisionero político del régimen  Adeco- copeyano  en La Isla Del Burro , en pleno lago de Valencia , el Presidente Rafael Caldera  ordenó  cerrar este centro  de concentración  y los prisioneros fueron  distribuidos  en otros centros penitenciarios del país. Manuel y diez más fueron  enviados a la cárcel de Sabaneta , en Maracaibo .
A  los dos días de haber llegado tuvieron que declararse en huelga de hambre . Tomaron  esa determinación  por   dignidad humana . Cuando llegaron  a la cárcel de Sabaneta , sabían perfectamente que allí había un pabellón  para presos políticos   y como ellos éran  presos políticos  esperaban  que se les  ubicara  en el mismo , pero no fue así  sino que se les  alojó con los presos comunes . Creyeron  ,  en esas cuarenta y ocho horas ,  que habían llegado al infierno  . A la cinco de la mañana  había que meterse en la cola para  tomar el desayuno , a las once del día  para ir almorzar y a las cuatro de la tarde , para la cena . De los once que sufrían esa  pesadilla  diez iban a comer y uno se quedaba cuidando los pocos  enseres y trapitos que tenían  . Las vidas de estos  revolucionarios  se regían por  normas de conducta y organización  que les  garantizaba una vida  más  holgada , respetuosa , más solidaria , sana y provechosa . Por eso el choque con una situación  contraria  a la  vida  y relaciones  de las que tenían en la Isla del Burro  provino de inmediato . Bastó que los presos comunes  les  robaran un radio  viejo para declararse en huelga de hambre con la finalidad que los trasladaran al pabellón de los políticos . Diecinueve días de huelga de hambre tuvieron  que soportar , pero al fín lograron  el  objetivo .
Cuando llegaron  al pabellón  de los políticos la situación volvió a su normalidad . Allí  estaban recluidos unos cincuenta presos revolucionarios .  Elaboraban su propia comida  ,  mantenían  el aseo y la limpieza del pabellón  , recibían formación política e ideológica , trabajaban en el taller y hacían deportes .  La administración de la cárcel  suministraba  los alimentos y demás insumos  y con los que les  proporcionaban los amigos y familiares de los presos  era suficiente para que tuvieran  una alimentación  sana , buena y abundante . Disfrutaban  de neveras , televisores , radios  , educación  y  los jueves y domingos  tenían la visita  de amigos y familiares Todo como producto de sus luchas por mejoras de sus condiciones de vida  como prisioneros del régimen burgués .
Internamente  estos políticos presos  estaban organizados en escuadras . El trabajo de la cocina  ,  el aseo y limpieza  del pabellón y los baños  le correspondía  diariamente a una  escuadra de siete hombres .
Una vez  llegaron al pabellón  unos campesinos del Estado Lara  que  fueron imputados como colaboradores del movimiento guerrillero . Venían de  estar  presos en el Teatro de Operaciones  de ese Estado , donde fueron torturados , les  pelaron el  coco  y pasaron hambre hereje por lo flaquitos que estaban . Uno de ellos  se llamaba   Simón  . Hombre de color blanco , bajo de estatura , de ojos verdes y grandes  , flaquito , coco raspado y con unos pantalones  talla  46 que para mantenerlos fijo en aquella cintura  talla 30 que tenía  era un prodigio de habilidad que ponía en practica  para lograr tal objetivo  Simón  perecía  un cotorrito pichón  que al solo verlo  dos sentimientos se mezclaban  en uno : ganas inmensas de reir  a carcajada libre  y por el otro , un repudio profundo contra aquellos verdugos  que osaron poner sus sucias manos en  el cuerpo de aquel humilde campesino . Todos fueron  designados a su respectiva escuadra . Dos días después´de haber llegado le tocó servicio a la escuadra  donde Simón   había sido asignado   . Y como era “ nuevo” le dieron la tarea de  cocinar las caraotas . Las pusieron  a ablandar  en la olla de presión  y le dijeron a Simón que cuando éstas tuvieran  treinta minutos  hirviendo  le quitara la válvula  de presión para que saliera todo el vapor  y luego abriera la olla y observara si las caraotas  se habían ablandado .
Ese día , como a las  once de la mañana , la mayoría de los presos políticos estaban trabajando en el taller., cuando se escuchó una explosión  , como el estallido de  una  granada  , en la  cocina  . Todos corrieron  hacia esa parte del pabellón  . Manuel fue uno de los primeros  y cuando llegó a la puerta de la cocina  vió a Simón  cuando corría hacia afuera  ,  lleno el rostro y el pecho de caraotas negras ,  solo se le veían los dos ojos verdosos desorbitados como si hubiera  visto un espanto , pasó a su lado más rápido que Pastor Maldonado corriendo en la Fórmula Uno y  gritando ¡ Esa Vaina , se Jodió ¡   . Luego se  averiguó la verdad del hecho , el mismo Simón  manifestó  que el jefe de escuadra le explicó como debía  hacer  para  abrir la olla de presión , pero que él se le olvidó sacarle la válvula de presión  y la destapó a la fuerza .
VEA UD , POR  IMPRUDENCIA  E INOBSERVANCIA  DE NORMAS DE CONDUCTA  PUEDEN SUCEDER HECHOS LAMENTABLES ..

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